lunes, 13 de enero de 2014

Mi hija se cayó (Los primeros pasos)

Fuente: http://bit.ly/1a38yOX
Él:      !!Por la .... re contra....!!
Ella:   ¡¿Qué estás haciendo?!
Él:      ¡Pero me he dado la vuelta sólo por un segundo!"
Ella:   ¡Ten cuidado pues, es tu hijo!

Las frases que surgen de una caída entre las personas que cuidan a la criatura son muchas, variadas y no siempre tan educadas.

Como hombres, tenemos dos clases de reacciones:
  • Si el bebé estaba al cuidado de la mamá, usualmente el resultado es llamarle la atención y recordarle que tiene que hacerlo con mucho más cuidado. Muchas veces este recordatorio viene acompañado de gritos y una pelea. Ellas tampoco lo toman bien y suelen responder con algo de su propia cosecha.
  • Si el bebé estaba al cuidado de nosotros, comúnmente trataremos de revisar al bebé y reaccionar en contra de cualquier llamado de atención pues no es importante en el momento. Eso si es que alguien no te quita a la criatura por temor a que le hagas "algo" peor.
  • (extra) Si el bebé ya camina y se cayó cuando nadie lo estaba viendo, puede provocar una suerte de combinación de las dos situaciones anteriores.
En todo caso, prepárate. Reacciona con calma. Los niños se han estado cayendo de diferentes lugares por miles de años y es muy probable (siento mucho decir esto) que el tuyo se va a caer más de una vez.

¿Qué hacer?  

Antes de los 3 meses

Las posibilidades de una caída son pocas antes de los 3 meses pues los bebés tienen poca movilidad. El problema viene cuando los alzas. Sus cuerpos aún son muy frágiles y en tu afán de sostenerlos demasiado delicadamente "se te pueden ir". Ten cuidado especialmente cuando la criatura esté envuelta. Hay casos de bebés que se resbalan cuando uno los está sosteniendo y terminan en el piso. :(

Cuando empieza a rodar

Los bebés aprenden a voltearse sobre su espalda y recorrer unos centímetros entre los  dos y los seis meses o más, nunca se sabe con estos chitis. El problema es que cuando la wawa está recibiendo su cambio de pañal, en un microsegundo, pueden desaparecer de tu lado y reaparecer en el suelo. Son como ninjas y pueden hacerlo muy rápidamente. Tienes que ser otro ninja (cinta negra) o algún personaje de Tekken o Avengers para agarrarlos. 

Lugares o momentos peligrosos:
  • Cambio de pañal No lo crees hasta que ocurre. Un día tu bebé te sorprenderá dándose la vuelta. Si ese día llega y te lo pierdes, es probable que te enteres cuando encuentres a tu bebé debajo de la cama.
  • Sillón. Es común que los papás los dejen ahí e ingenuamente piensen que se van a quedar quietos mientras hacen algo.
  • Cuando alguien toca el timbre. (Piensas que no se va a caer y entonces ¡pum! ¡pow! Al mejor estilo Batman de antaño)
  • Llamada telefónica. Te concentras en lo que alguien te dice y ¡zas!
  • Dándole leche. Si te tocó dar la mamadera, el calor del bebé, más las noches sin dormir te pueden jugar una mala pasada. No te acomodes tan bien.
  • Aprendiendo a caminar. En tu mente eres tan rápido como Flash, aunque lo más probable es que lo agarres al primer rebote.
En general, habla con tu pareja con anticipación acerca de esto. Las cosas pueden salir muy mal entre los dos pues son los instintos los que reaccionan cuando el chiti se rompe la crisma. Lo más probable es que no se haga más que un chichón. En todo caso, si no hay marca visible del golpe, no te preocupes tanto. Si hay un chichón, llama al médico y no dejes que la wawa duerma. Si hay sangre y algo más, llama al doc y peléate luego, en serio.

Si todo sale bien, luego tendrás que lidiar con una mamá que se siente culpable por lo que pasó, pero esa es otra historia. ¡Suerte! :)




1 comentario:

  1. La pura verdad, un pestañeo y mi wawa tirada en el suelo llorando, para sus abuelos y tías fui el mas grande criminal...

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