jueves, 28 de abril de 2011

El post de los no, no, no, nunca (I)

En nuestra infinita sabiduría, nosotros los hombres, muchas veces creemos que tenemos las soluciones a todo. Aquí hay una lista de NO, no siempre. Osea nunca, ni se te ocurra.

No es cuestión de ser negativos, sino de NO meter la pata antes que sea tarde. En esta lista vas a encontrar las cosas en las que realmente no te puedes equivocar. :)
  1. Nunca juegues bruscamente con ella cuando esté embarazada o hagas movimientos rápidos. Esto es especialmente aplicable a los primeros 4 meses de embarazo cuando tú estás recién asimilando tu futuro estado de papá. Un error de cálculo y le puedes causar a ella y al chiti un trauma de por vida.
  2. Evita el alcohol a toda costa (tú y ella). Está comprobado científicamente que un poquito de cerveza no va a hacer que sus pestañas salgan más crespas o que si ella le echa un sorbito de cerveza tu chiti va a salir choquito, NO. Lo más difícil de esta parte es aguantar la presión social. Al parecer nuestra sociedad "sabe" que un poquito de alcohol es "bueno". Ten mucho cuidado. No se sabe cuánto es seguro y no vas a ser vos quién lo averigue. Tampoco bebas tú por ella. Un borracho no hace buena pareja con una embarazada. Si te encuentras en esta situación, seguramente estás en esos eventos sociales en los cuales no puedes negarte a una copa. Despídete de manera gentil, y sal de ahí. Malformaciones, labio leporino, tendencia a la delincuencia son solo algunos de los problemas que podrías tener luego. No vale la pena arriesgar la salud de tu chiti por satisfacer a esa tía o a aquel amigo.
  3. Evita los viajes a partir del séptimo mes. Poco oxígeno en la cabina del avión, imposibilidad de cambiar de posición en los buses, inclusive en el auto la cosa se pone color de hormiga. Procura que los últimos meses sean lo más agradables. Los dolores se ponen peores y no querrás tener a la señora gritándote hasta de lo que te vas a morir sólo porque está incómoda. Además, la falta de oxígeno puede provocar hasta un desmayo.
  4. Nunca le des leche de fórmula preparada sobre leche materna. Claro, vos lo único que quieres es lo mejor para tu nena o nene. Piensas, "la leche materna es buena, pero podríamos hacerla mejor si le mezclamos fórmula!" Pues no, lo único que harás será hacer trabajar el doble a los pobres riñones de tu pobre criatura.
  5. Nunca dejes a tu bebé desatendido en la cama. Los bebés por regla general empiezan a rodar sobre sus espaldas a los tres meses y pueden desaparecer de tu vista y aparecer en el suelo mientras tú te das vuelta a ver si alguien tocó la puerta (sí, les toma como un segundo rodar y causar revuelo). Y a menos que seas un ninja, es mejor que prevengas hacia dónde podría rodar en vez de confiar en que "no va a pasar nada".
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